jueves, 14 de mayo de 2015

QUÉ OCURRE SI TE APELLIDAS PÉREZ

DIMES Y DIRETES

Pues que más te vale que tu segundo apellido, el de la madre, sea un poco engolado o tenga empaque. Si no es así y te apellidas Pérez Rodríguez, Pérez Pérez o Pérez García –lo mismo vale si se invierten, o sea, Rodríguez Pérez, Pérez Pérez (éste, como es capicúa, queda igual) y García Pérez–, llévalo con toda la paciencia y humildad que puedas. Pero me reconocerás que ganas un montón si te apellidas, verbigracia, Pérez Gorgonzola, Pérez Arespacochaga o Pérez de la Merced. Es verdad que siempre correrás el peligro de que, para humillarte, te denominen simplemente Pérez. Es aquí donde la personalidad, si la tienes, una personalidad fuerte, rotunda, arrecha, que dirían en otros lugares, debe jugar a tu favor. Dirías en este caso: ‘Caballero, le ruego se dirija a un seguro servidor de manera suficientemente indicativa. Pérez hay muchos; Pérez Arespacochaga (o Pérez Gorgonzola, o Pérez de la Merced), la persona que tiene usted delante, máxime que soy hijo único, Pérez Arespacochaga, decía, sólo yo’. Y te impones, que es de lo que se trata. Pérez Lurueña. Este apellido es fantástico, mucho mejor que los arriba mencionados. Se puede decir que te ha tocado la lotería. Médico, juez o cardenal, no te queda otra. Imagínate que te estás identificando, donde sea, aquí no me meto. ¿Nombre? Alberto, Carlos, José Ramón… el que sea. ¿Apellidos? Pérez Lurueña. El que te toma los datos levanta brevemente su mirada y la vuelve a bajar, pensando: ‘Ojo con éste, que es alguien’. A continuación, te deja ir, diciendo: ‘Por hoy pase, señor Pérez Lurueña. Intente en el futuro no saltarse más stops. Los muertos ya los retiramos nosotros. Tenga un buen día’. Pérez Lurueña. Qué suerte tienes, cabronazo. 

3 comentarios:

  1. Bastante verdad la historia de los apellidos y sus resultados, pero como todo en la vida...todo muda, quizás en los momentos actuales ya tiene digamos como más categoría los apellidos corrientes ¿ o no? o más poder...o más comodidades, y algunos ilustres se han quedado atrás. En fin prefiero las excepciones, y la persona que demuestre quien es...sea de apellidos aristócratas o corriente, te impresiona ver la gente corriente cómo han cambiado a mal y te podrías encontrar con alguien ilustre que sea buena gente, así de claro...de todo en la vida del Señor...

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  2. Resumo en un periquete: Existe " gente corriente" y " gente corriente", y " gente ilustre" y " gente ilustre".

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  3. El Apellido no determina la calidad humana de la persona, sólo lo hace su propia persona, sin más complicaciones, sea de gente corriente o de persona ilustre.

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